River vence a Barracas Central y se afirma en la Copa de la Liga
River Plate consiguió una victoria clave frente a Barracas Central por 2-0, en un encuentro disputado en la cancha de Lanús, correspondiente a una nueva jornada de la Copa de la Liga. Con un equipo diezmado por múltiples bajas, el conjunto dirigido por Martín Demichelis mostró nuevamente una versión práctica y efectiva, similar a la que había empatado hace apenas tres días con Argentinos Juniors.
La diferencia, esta vez, estuvo en el resultado: los tres puntos permiten a River afirmarse en la competencia, aún sin alcanzar su mejor versión futbolística. La solidez defensiva y el oportunismo ofensivo fueron las claves de un equipo que, a pesar de sus limitaciones actuales, supo sacar adelante un partido trabado.
Franco Armani volvió a ser figura. El arquero fue determinante con una doble atajada en el segundo tiempo ante Cantero, demostrando que sigue siendo un pilar fundamental del equipo. En ataque, Miguel Ángel Borja volvió a convertir y llegó a dos goles en los primeros dos partidos del torneo. El delantero colombiano sigue siendo una pieza clave en el esquema ofensivo.
El partido también sirvió para confirmar el buen presente de los juveniles. En el primer tiempo, Franco Mastantuono, de apenas 16 años, se convirtió en el motor del equipo. Mostró personalidad, talento y un despliegue digno de un jugador con mucha más experiencia. Sus compañeros no dudaron en buscarlo y él respondió con calidad y confianza.
Recién cuando Nicolás Fonseca logró soltarse, River empezó a controlar el juego. El mediocampista, que tenía la difícil tarea de reemplazar a Enzo Pérez, se mostró más seguro en la marca y aportó claridad en la salida. Rodrigo Aliendro también levantó su nivel al ubicarse en el centro del campo, y Nacho Fernández encontró su mejor versión cuando rompió el esquema y jugó con mayor libertad ofensiva.
En el complemento, el ingreso de Agustín Ruberto renovó el ataque. El delantero, figura del último Mundial Sub 17, aprovechó su oportunidad y marcó un golazo, demostrando que está listo para competir en Primera. Su determinación fue clave para cerrar el partido y darle tranquilidad al equipo.
Sin embargo, no todo fue positivo para River. El equipo mostró fragilidades defensivas tanto por los laterales como por el centro, donde solo Leandro González Pirez estuvo a la altura. Además, Esequiel Barco no logró mantener el nivel que lo había destacado en 2023. Aunque asistió a Borja en el primer gol, volvió a caer en la trampa del traslado excesivo, perdiendo efectividad en el juego.
Con un calendario ajustado, River deberá seguir ajustando piezas. El domingo enfrentará a Vélez, en un nuevo desafío para consolidar su identidad de juego. Demichelis tendrá que trabajar sobre los aspectos positivos de este triunfo, pero también corregir errores que pueden costar caro a medida que avance el torneo.
Por ahora, el equipo se sostiene en la seguridad de su arquero, en los goles de Borja y en el aporte fresco de sus jóvenes promesas. La meta es clara: construir un River más sólido, confiable y competitivo, que esté a la altura de las expectativas del entrenador y de los hinchas en este 2024 que recién comienza.
